Reseña: Madame Xanadu #1

Título: Chapter The First: By the Runes.

Guionista: Matt Wagner.
Artista: Amy Reeder Hadley.
Colorista: Guy Major.
Rotulista: Jared K. Fletcher.
Editores: Bob Schreck y Brandon Montclare (asistente).

Portada: Amy Reeder Hadley y Matt Wagner

Publicado el Miércoles 25 de Junio por Vertigo (DC Comics).

Nueva serie del sello Vertigo de DC Comics, por el que parece un equipo creativo ganador, Matt Wagner, a quien ya conocemos por sus trabajos personales (Grendel, Mage) o por su trabajo con Batman y Amy Reeder Hadley, quien tras ganar un concurso de nuevos talentos y trabajar el el manga Fool's Gold, para Tokyopop hace su llegada a DC Comics.

Esto de elegir títulos al azar (y a veces no tanto), me obliga a poner advertencias... casi no ubico a Madame Xanadu más allá de algunas apariciones esporádicas en macrosagas de DC donde se necesita algún ser místico que ore, invoque o hable del fin del mundo. Creo que la última vez que la vi fue en la miniserie "Day of Vengeance" donde el Spectre le sacó los ojos, pero aquí no parece haber mucha relación de continuidad con esos acontecimientos (gracias).

La Trama: Siendo un número uno no hay mucho que contar... peor aún, además de ser el #1 es un número de origen, así que las posibilidades de perderse aquí son nulas.

Nimue es un ser mágico de rasgos inocentes, vive en el bosque rodeada de hadas y es interrumpida en sus cavilaciones por un grupo de Druidas que le solicitan interferir en favor de su Reino ante la hemana de Nimue y ante el hechicero del Rey. Les dejo las identidades en incógnita, para que lo descubran mientras leen como lo hice yo, pero si de todas formas quieren saber supongo que puedo darles un link.

El Guión: Matt Wagner... qué puedo decir, la estructura del guión se agradece porque permite ir conociendo la historia al mismo tiempo que la protagonista, lo que es un descanso entre tanto narrador omnisciente por ahí.

A nivel de prosa, diría que hay un anhelo lírico por parte de Wagner que a veces alcanza muy buenos resultados y a veces no tanto. Niños, éste es un comic que intenta incluir lírica en su lenguaje, noten lo inusual del recurso. BIEN, muy bien, también se agradece a Wagner su inconformismo, su rebelde espíritu literario.

La historia avanza al ritmo preciso, porque al tratarse de un personaje que estamos conociendo hay que poner atención en los detalles para entender sus motivaciones y entorno. Como dije antes, Wagner no se preocupa de explicar todo al detalle, quiere que el lector decubra la historia con la lectura, le da todos los elementos necesarios pero le pide al lector que se involucre activamente. Seguramente algunos elemntos gráficos, como las runas y las cartas del Tarot, serán de mayor utilidad para quienes esten familiarizados con dichos símbolos (no creo que se hayan colocado azarosamente), sin embargo mi conocimiento al respecto es casi elemental así que si en su propia lectura tropiezan con datos que puedan ser del interes de todos, no duden en volver a este artículo y agregarlo en la sección de comentarios.

Dibujo: Amy Reeder Hadley es un nombre nuevo para mi. Como les conté hizo su debut en una serie de la Editorial Tokyopop llamada Fool's Gold, aquí pueden visitar su página web.

Lógicamente el estilo de dibujo es cercano al manga, pero, y este es un gran PERO, ese enfoque se circunscribe al diseño de personajes y no al diseño de página. El Manga y el comic aparecen en publicaciones completamente distintas y por lo mismo el diseño de página de uno y otro generalmente no es trasladable... tener un comic americano con tres viñetas por página hace que se vuelva una lectura sumamente insustancial, tener un manga con nueve viñetas por páginas lo vuelve aburrido.

El dibujo de Amy Reeder Hadley es bonito, tal vez pueda comparárselo un poco con el del grupo Clamp, pero sólo a manera de referencia. Para ser una artista casi debutante, muestra un impresionante manejo de ángulos de cámara, consistencia en los rasgos faciales, dominio de expresiones, construcción de secuencias y elaboraciones de fondos. Tal vez lo único que pueda reclamarle es que por alejarse de las representaciones tradicionales de los personajes que emplea, a uno se le venga a la mente una historia del tipo "Sueño de una noche de Verano" al contemplar su trabajo, lo que está bastante alejado de la idea que uno debiera hacerse. Este tipo de interpretaciones son una prerrogativa del dibujante, así que a uno le toca decidir si le gusta o no. Yo estoy excéptico, pero dispuesto a seguir probando.

En suma: Madame Xanadu me dejó un muy buen sabor de boca aunque no logro aún decidir si se trata una colección que logrará atraerme permanentemente, esa clase de decisiones quedará para los números siguientes.

Creo que hay un buen número de indicios aquí para pensar que Madame Xanadu podría convertirse en corto plazo en una de las series centrales de Vertigo, especialmente tras el término de Y - The Last Man, será cosa de darle tiempo al equipo creativo de mostrar exactamente qué es lo que buscará desarrollar en la serie... por ahora, se ve todo bastante bien.

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